viernes, 4 de diciembre de 2015

De derrota en derrota...

 
 
 
En multitud de ocasiones nos encontramos en situaciones que no nos permiten llevar la vida que queremos. Tenemos muchas obligaciones, demasiadas; tenemos muchos compromisos, tenemos unas relaciones sociales que  hay que mantener, viajes, reuniones, podemos añadir todos los impedimentos que nos rodean.
 
Sin embargo, hay algo en nuestro interior que no duerme. Hay una pequeña lucecita que se mantiene encendida invariablemente día tras día, como un lejano faro que nos obliga a no perder el rumbo y que nos recuerda realmente quienes somos.
 
Esa lucecita es el deseo de salir a correr, de dejar preparada la ropa por si mañana tengo tiempo, de seguir mirando páginas de deportes, revistas de deporte, de leer libros que nos ayuden a crecer.  Esa lucecita nos indica que siempre estamos preparados, nos recuerda quienes somos realmente debajo de esas americanas, corbatas, ordenadores, aviones, documentos, etc. 
 
Y aunque físicamente no nos podamos mover, si que hay un movimiento interior, un movimiento psicológico que nos obliga a seguir en nuestra ruta. Y no olvidemos que un paso pequeño continúa siendo un paso y un que un movimiento pequeño sigue siendo un movimiento que nos aleja de la inercia del sedentarismo.
 
Y esa lucecita, ese movimiento interior nos dirige de derrota en derrota hasta la victoria final.  
  
De todo esto me he dado cuenta cuando me he visto programando las carreras de la temporada que viene. Y es que aunque estemos sentados, seguimos de alguna manera en movimiento. 
 
USAF

No hay comentarios:

Publicar un comentario